El Sistema Nervioso Autónomo (SNA) es una parte fundamental de nuestro sistema nervioso que te va a ayudar a adaptarte al medio que te rodea y hacer que esté lo más estable posible. En este blog, exploraremos en profundidad qué es el SNA, cómo funciona y por qué es tan importante para nuestra salud y bienestar.
¿Qué es el Sistema Nervioso Autónomo?
El Sistema Nervioso Autónomo es una parte del sistema nervioso que controla las funciones automáticas del cuerpo, como la respiración, la digestión, la circulación sanguínea, la temperatura corporal, el sistema inmunitario, etc. Está por todo tu cuerpo y se compone de dos subdivisiones principales: el Sistema Nervioso Simpático y el Sistema Nervioso Parasimpático. Los dos siempre van a estar activos, aunque se van a ir alternando en función de tus necesidades. Y una buena regulación es lo más importante.
Funcionamiento del Sistema Nervioso Autónomo
El Sistema Nervioso Autónomo funciona de manera automática e involuntaria para regular las funciones corporales y mantener el equilibrio interno del organismo, también conocido como homeostasis. El Sistema Nervioso Simpático se activa en situaciones de estrés o peligro (lucha o huida), mientras que el Sistema Nervioso Parasimpático se encarga de generar y guardar energía.
Importancia del Sistema Nervioso Autónomo
El SNA desempeña un papel crucial en nuestra salud y bienestar general. Un desequilibrio en el funcionamiento del SNA puede tener consecuencias negativas para la salud, como trastornos del sueño, problemas digestivos, hipertensión o hipotensión, peor funcionamiento del sistema inmunitario, dolores en la regla, migrañas, sensación de cansancio de forma mantenida y muchos más. Por lo tanto, es fundamental cuidar y mantener en equilibrio nuestro Sistema Nervioso Autónomo para garantizar un funcionamiento óptimo de nuestro cuerpo.
Además también se le está relacionando con la capacidad del propio cuerpo para eliminar células cancerosas, un buen funcionamiento del sistema inmune o un control de cardiopatías como la diabetes y la hipertensión arterial.
A veces no da síntomas como tal, pero su mal funcionamiento está en la base de casi cualquier patología crónica o grave.
¿Cómo se puede desequilibrar este sistema? La causa más común quizás te suena… EL ESTRÉS. Pero un estímulo mantenido a este sistema también lo puede alterar, cómo pueden hacer las cicatrices con adherencias. Pero las intolerancias también nos pueden perturbar.
Este puede hacer que tu sistema Simpático esté demasiado activo, lo que te puede provocar un aumento de la tensión muscular de forma mantenida, hipertensión, estreñimiento, una frecuencia cardiaca más alta, mal funcionamiento digestivo, nos cuesta conciliar el sueño, aumento del dolor de la regla y muchos más.
También nos podemos encontrar un sistema Parasimpático hiperactivado lo que nos puede provocar hipotensión, depresión, hipersensibilización (las cosas nos duelen más de lo normal), una sensación de cansancio de forma constante, dormir muchas horas y notar que no se descansa, diarreas y un largo etcétera.
Síntomas más comunes que normalizamos
¿Te has fijado que muchos nos ponemos enfermos justo en las vacaciones? A lo mejor al relajarnos después del estrés del trabajo no acaba de funcionar bien el sistema inmune.
Me duelen las cervicales, las lumbares y en poco tiempo me han salido otros dolores. Mucha casualidad que te hayas lesionado tantas veces en poco tiempo, ¿no podría ser que tu sistema nervioso perciba como doloroso estímulos que no lo son?
Después de comer se me hincha la barriga y el médico me ha dicho que no tengo nada ni intolerancias. Un mal funcionamiento del nervio Vago (nervio parasimpático) nos puede condicionar MUCHÍSIMO
Ojos secos o llorosos, los extremos nos dan pistas. El punto medio es la clave.
Consejos para cuidar tu Sistema Nervioso Autónomo
- Practica técnicas de relajación, como la meditación y la respiración profunda, para reducir el estrés y activar el Sistema Nervioso Parasimpático.
- Mantén una dieta equilibrada y saludable para promover un buen funcionamiento del sistema digestivo, pero saber si tenemos alergias o intolerancias puede ser de ayuda.
- Realiza ejercicio regularmente para estimular la circulación sanguínea y fortalecer el Sistema Nervioso Autónomo.
- Las Inmersiones en agua fría activan el sistema simpático.
- Duerme lo suficiente para permitir que tu cuerpo se recupere y se regenere adecuadamente.
En resumen, el Sistema Nervioso Autónomo es una parte esencial de nuestro sistema nervioso que regula funciones vitales de nuestro cuerpo de forma automática. Cuidar y mantener en equilibrio nuestro SNA es fundamental para nuestra salud y bienestar general. ¡No subestimes el poder de tu Sistema Nervioso Autónomo y dale el cuidado que se merece!